El futuro del trabajo: hacia las plataformas colaborativas con IA

Las plataformas digitales colaborativas con inteligencia artificial permitirán una nueva forma de colaborar que potencia las capacidades de los equipos, agiliza la toma de decisiones y permite nuevas formas de liderazgo.

La siguiente generación de plataformas digitales colaborativas aplicadas al ámbito del trabajo vienen dotadas con inteligencia artificial (IA): habrá bots que realicen labores de ordenación y que sugieran acciones o propongan siguientes pasos. 

Así nos lo contó Ulla Luukas, Directora de Alianzas en Howspace, en su participación en el think tank Future Trends Forum sobre el futuro del trabajo, organizado por la Fundación Bankinter. 

Teniendo en cuenta el comportamiento humano

Para esta experta, lo primero que se necesita es entender el comportamiento humano de manera que se puedan diseñar nuevas formas de trabajar y de colaborar.  

Resumiendo mucho sobre la importancia del comportamiento para diseñar una plataforma colaborativa de próxima generación: 

1.- Las personas necesitamos ser escuchadas y tenidas en cuenta. 

2.- Las emociones dirigen nuestro comportamiento, de manera que el bienestar emocional tiene enormes implicaciones en el rendimiento individual y grupal. 

3.- Necesitamos comunicarnos y establecer diálogos respetuosos y positivos. 

Con esto en mente, las plataformas colaborativas para trabajar deben potenciar todas las ventajas de la IA para permitir el trabajo asíncrono: Una vez se organiza un proyecto, se necesitan colaboraciones que, en su mayoría, pueden realizarse de manera asíncrona. Las reuniones de varios o todos los miembros de un equipo se hacen entonces no tanto para coordinar, sino para tomar decisiones estratégicas y establecer diálogos fructíferos.  

¿Y cuál es el papel de la IA en las plataformas colaborativas?

Las soluciones de IA deben enfocarse, sobre todo, para ganar efectividad y potencia, no para lograr ahorros de costes. Se trata de eliminar los puntos de fricción y permitir que los profesionales puedan dedicarse de pleno al trabajo creativo, resolutivo y ejecutivo, dejando las tareas más rutinarias en manos de los algoritmos. 

Las empresas que triunfan cuando adoptan IA y mantienen o aumentan el empleo, son aquellas que se reimaginan e implementan nuevas arquitecturas organizativas, nuevos procesos, y adoptan nuevos comportamientos y nuevas actitudes. Así se desprende del estudio Expanding AI’s Impact With Organizational Learning llevado a cabo por el BCG Henderson Institute junto al MIT Sloan Management Review.  

Las plataformas colaborativas potenciadas con IA permiten a los equipos realizar sus labores tanto de manera síncrona como asíncrona, aprovechando la tecnología para que la organización del trabajo se haga de la manera más fluida posible, evitando “cuellos de botella” y malentendidos. Permiten también una toma de decisiones más democrática si así se quiere. 

El liderazgo como servicio 

En este contexto, se potencia el liderazgo lateral, donde todos los miembros de un equipo, o muchos de ellos, tienen habilidades de liderazgo. En la intersección entre el liderazgo lateral y las plataformas digitales colaborativas, surge el concepto de liderazgo como servicio: LaaS – Leadership as a Service-. 

Cada profesional tiene necesidades distintas respecto a su líder y distintos momentos de su vida laboral: unos necesitan mentoring, otros comunicación, otros herramientas. El liderazgo como servicio consiste en desarrollar un entorno y una cultura de liderazgo donde los profesionales se liberan de la mentalidad jerárquica tradicional. La toma de decisiones debe ser diferente, permitiendo al profesional con más conocimiento en un área concreta que sea el que tome la decisión, independientemente de su posición en la compañía. 

Para concluir, Ulla nos habla de la importancia de aprovechar la potencia de la tecnología para crear equipos de trabajo mucho más ricos y potentes, mediante la diversidad. Profesionales con distintos perfiles, diferencias de edad, de género y de experiencia, forman equipos mucho más resolutivos que los equipos “monocromáticos”.

Fuente: Fundación Innovación Bankinter (7 de diciembre de 2021)